PERRO DE AGUA PORTUGUES

El Perro de Agua Portugués una antigua raza que utilizaban los pescadores de la provincia costera de Algarve,para tirar de las redes en el agua, como portador de mensajes de barco a barco. Cuando su dueño estaba pescando, el perro seguía la presa con la mirada y si un pez se escapaba, se lanzaba al mar para atraparlo, zambulléndose si era necesario. Actualmente se utiliza como perro de guardia y de compañía, y en tierra como un buen cazador de conejos.

Esta raza es fuerte, leal, valiente, muy consciente, un poco desconfiada por naturaleza y por supuesto un amante del agua. Originalmente, su pelaje se cortaba de una forma característica para evitar que sus patas posteriores fueran arrastradas por el agua al nadar y para proteger el pecho del choque térmico con el agua fría.

Es una raza muy cariñosa a la que le encanta pasar tiempo y estar con su familia, tienen una gran resistencia y les encanta el ejercicio. Son unos perros muy buenos con los niños y por lo general también se llevan bien con otros perros y con otras mascotas que podamos tener en casa,  así que en este aspecto no nos darán ningún problema, eso sí, con los gatos necesitan cierta confianza para estar a gusto con ellos.

El adiestramiento de esta raza será fácil si sabemos cómo comunicarnos con un perro, hay que tener en cuenta que son muy sensibles al tono de voz y los dueños tienen que tener siempre una actitud calmada y coherente con el perro, así como hay que considerar que el Perro de Agua Portugués (como casi todos los perros de agua) es extraordinariamente inteligente y que se tomará demasiadas libertades si él cree que tiene más autoridad que sus dueños, así que debemos asegurarnos de ser constantes, firmes y estar seguros de nosotros mismos en la hora de tratar al perro, porque esta raza puede tomar decisiones sin contar con nosotros.

Dispuesto y siempre con ganas de agradar, son buenos guardianes y además tienen un gran sentido del olfato. Son bastante mordedores, así que debemos darle cosas para que mastiquen. Los ladridos y el nivel de actividad cuando están es casa varían mucho dependiendo de los dueños y de las capacidades que tengan para mantener al perro equilibrado, por esta razón debemos ser siempre consistentes con el perro y establecernos como líderes de la manada, además de proporcionarle ejercicio tanto mental como físico a diario.