HUSKY SIBERIANO

Es una raza muy resistente, robusta y sociable. Es un perro que ni ladra ni muerde, sino que protege con una gran intimidación. Tolera mal los espacios pequeños o cerrados.

Para algunos dueños sedentarios el mayor problema con el Husky Siberiano es que requiere mucho ejercicio. Es una raza que les encanta caminar y correr. En función de esto no es que no sean fieles sino que el problema (si no se tiene con paseador) es que se van caminando y caminan tanto que cuando se acuerdan que tienen que regresar a casa ya están perdidos.

El Husky Siberiano es un perro imponente que necesita espacio para desarrollarse, por lo que no es recomendable tenerlo en un apartamento a menos que el dueño esté dispuesto a sacarlo para que se ejercite y exista la posibilidad de llevarlo a un parque donde el pueda jugar y correr a su gusto, con al menos tres salidas al día y que en total duren más de una hora de actividad.

Se las arreglan para ser excelentes trepadores y les gusta hacer huecos en la tierra. El husky se ha hecho famoso por su tendencia a fugarse y a negarse a obedecer a la orden de "ven".

Es un perro muy atento y servicial pues siempre están dispuestos a complacer a su amo y a pesar de que están acostumbrados a vivir en jauría estos desarrollan un apego con el dueño o la familia con la que viven. Así que el dueño debe tener el carácter suficiente para poder dominar al perro y el cariño suficiente para ganar su respeto.

Es amable y amistoso, aunque al mismo tiempo atento y curioso. En el perro adulto se puede hallar cierta reserva y dignidad. Su inteligencia, docilidad y disponibilidad hacen de él un compañero amable y un trabajador generoso. Es cariñoso y sociable con las personas.

Dicen del husky que no puede aprender a obedecer. La verdad es todo lo contrario: si lo enseñas a cumplir tus órdenes desde muy joven, será perfectamente capaz de ser un perro obediente y disfrutar incluso de serlo. Atención particular debe ponerse en el cachorro durante los primeros meses de vida. En este período, se establece una duradera relación afectiva entre perro y amo.

Desde muy joven, quiero decir desde el día en que llegue a tu casa, debes empezar a explicar de manera autoritaria que en tu casa lo más importante es lo que tú quieres o no que él haga. Al no hacer esto por la razón que sea puedes esperar un futuro bastante poco apetecible.