Testimonios
Mariana y Wilson – Paul
Los avances de Paul fueron notables desde la primera semana cuando tenía el gusto de verlo aprender y esforzarse por su salchicha mientras yo quedaba complacida.
Con sólo 3 meses entró en la academia de entrenamiento, desorientado pero dispuesto, con energías a millón. El valor de él crece porque ahora no sólo es hermoso, querido por todos sino también es un perro que obedece a comandos básicos sin inconveniente.
Los profesores en Atención Canina tienen cada uno su estilo y todos son muy preparados. A mi particularmente me asombra que con sólo 4 meses se mantenga en Stay (quito en un sitio) pese a las posibles distracciones.
Darle educación a tus hijos, así lo veo! Vale la pena 100%. Siento que al cumplir con reglas hasta él vive más feliz, no vive en un ambiente de regaños ni tiene que vivir amarrado, es feliz, sano y sabe cómo comportarse.
La dedicación que se debe tener es constante pero elegimos darle lo que necesite porque en la casa nos da alegría, se desvive por su papá y es nuestro guardián.
Los entrenamientos sin duda, seguirán hasta que alcance todos los niveles!