Testimonios
Patricia y Andrea – Fiona
Fiona es una niña muy deseada, cuando llego al apartamento nos llenó de alegría y tristeza a la vez, ya que mi hermana y yo temíamos que nuestro padre no la aceptara porque era muy grande, nos gustaba jugar con ella pero era muy tosca y nos mordía, nos dejaba los brazos y la manos moradas por los mordiscos, a la hora de bajarla era incontrolable y nos daba pena salir con ella, ya que no nos hacía caso. Nos recomendaron a Rafael y fue lo mejor que pudimos hacer por ella y por nosotras. Para nosotras que somos las madres de Fiona, Rafael es como su padre, nos ayudó a entenderla y hacer que ella nos entendiera. Desde que conocimos a Rafael, Fiona es manejable y educada, ahora podemos convivir mejor con nuestra hija, todo gracias a lo que le enseño a Fiona y a nosotras.