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Realidades del Collar de “Pinchos”

 

Un collar canino se utiliza para controlarlo al perrito ya que proporcionaun asa parael agarre, el entrenamiento y la identificación, colocando placascon la información del dueño.

Hay dos grupos de collares caninos según su función:

Collares para Entrenamiento:

1.      Collares Planos

2.      Collar Ahorcador

3.      Collares de Entrenamiento, Collares de Puntas Romas, o de “Pinchos”

4.      Collar Martingale

5.      Collar Halti


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Collares Básicos:

1.      Collar de cuero con hebilla tradicional

2.      Collar antipulgas

3.      CollarIsabelino

4.      Collar con sistema de liberación

5.      Collares Fur Saver

Nos centraremos en el controversial Collar de Puntas Romas, debido a que hay muchas personas que piensan, escuchan o leen que lastiman o les hace daño a sus perros.

Para entender cómo el Collar de Entrenamiento funciona como un estímulo, primero hay que entender cómo aprende el perro. El perro aprende cuando las ventajas y desventajas de sus acciones se detallan en blanco y negro. Cuando la elección entre las ventajas y las desventajas está claramente definida, el perro es capaz de hacer su decisión sin estrés o confusión.

La madre de cachorritos recién nacidos les enseña a no alejarse del lugar donde duermen y comen tomándolos con su boca por el cuello y regresándolos al sitio, esto lo hace sin lastimarlos, perforarlos o hacerles algún daño, en el momento que los sujeta por el cuello ejerciendo una presión mínima y los eleva del suelo, el cachorro instintiva y naturalmente toma una actitud de sumisión generada por la inseguridad de no tener contacto con el suelo. Con varias repeticiones de este proceso el cachorro ya tiene una idea clara en su mente: no me debo alejar o me van a “corregir”, de la misma forma sucede con otros comportamientos, comienzan a corregirse hasta que se extinguen.

Tomando esa idea de la naturaleza y de cómo una madre corrige a su cachorro, hacemos lo análogo con el collar de entrenamiento. Este collar ayuda a los dueños a controlar incluso al perro más revoltoso y fuerte, a veces se refieren a ellos como collares de estrangulación o ahorcadores, pero no lo son. Son una pieza eficiente que no ocasionará daño alguno a nuestro perro siempre y cuando se seleccione y use correctamente.

Existen los metálicos (que son de níquel cromado unos y con acero inoxidable otros) y los plásticos, éstos últimos recomendados para los perros pequeños que no poseen tanta musculatura en el cuello y fuerza.

Si se usa adecuadamente (y para eso deben consultarle a un profesional) será una herramienta útil en múltiples circunstancias, sobre todo en los casos de graves desigualdades de fuerza entre perro y dueño.

El diseño de este collar es autolimitante, es decir, que no puede seguir ejerciendo presión una vez que ha alcanzado su máxima constricción. Un collar "ahorcador" no tiene esta limitación.

Esta tracción limitada, sumada al diseño del ángulo en los dientes (puntas romas), impide que cuando se corrija las puntas queden lo suficientemente cercanas entre sí como para pellizcar la piel de la mascota.

Por favor observe detalladamente el extremo (punta) de los dientes o “pinchos”, estos deben ser romos (redondeados), en muchas tiendas se consiguen unos collares cuyas puntas se logran cortando transversalmente el material y no se les da ninguna terminación redondeada, por lo que queda un borde en forma de circunferencia con cierto filo, lo cual puede ocasionar daños a la piel del perrito.

Cuando no usar un Collar de Entrenamiento o “Pinchos”:

-          Cuando la mascota se queda sola en el hogar

-          Cuando el entrenador observa que puede haber agresión redirigida

-          Cuando un cachorro está aprendiendo a caminar con correa

-          Cuando ha tenido una operación reciente en el cuello (cirugía de tiroides o extirpación de masas en el cuello) – tampoco se recomienda el uso de ningún otro tipo de collar, en este caso el harnes es lo recomendable mientras se recupera.

-          En entrenamientos de agitación (protección y defensa)

-          No colocarlo con las puntas hacia afuera, ya que pueden lastimar o herir los ojos de otra mascota o niños pequeños.

Surgen dificultades de formación cuando el entrenador (o dueño) no le han dejado claro al perro como lograr un resultado gratificante (ventaja). Es responsabilidad del entrenador ver qué estímulo es suficiente para que el perro perciba claramente su ventaja, la cual es seguir las reglas de la familia o entrenador y así ganarse una recompensa (refuerzo positivo) tras una marca auditiva, por ejemplo el Clicker.

Las características de la raza juegan un papel importante en términos de sensibilidad física. Muchas razas fueron criadas selectivamente para ser físicamente insensible, algunos perros deportivos y los terriers, son altablemente insensibles, y si bien esto puede representar un problema para el dueño promedio en el entrenamiento, son estas características las que le permiten a esos perros lograr alcanzar las tareas para las cuales fueron criados. Un Labrador que no le gusta nadar o un terrier que fue fácilmente disuadido por las mordeduras defensivas de su presa, no podrían hacer su trabajo eficientemente. Las razas cuyo desempeño no requiere esta característica, también tienen individuos que son altamente insensibles producto de los cruces entre múltiples razas, incluso aquellos perritos que nacen en la calle y posteriormente son adoptados o que nacen en nuestros hogares y cuyos padres son mestizos, vienen de un proceso de selección natural, donde los individuos más fuertes y rápidos generalmente son los que sobreviven.

Existen otras situaciones que requieren el uso de este Collar de Entrenamiento, tales como una persona pequeña, de edad avanzada o débil, con un perro muy grande. A menudo no pueden tener control físico sobre el perro, sobre todo cuando el perro está plenamente consciente de su fuerza superior. Se necesita mucha menos presión y fuerza con el collar de entrenamiento para resolver  los problemas causados ​​por un desequilibrio de fuerza entre el perro y su dueño.

En el caso de perros muy pequeños o de razas “toy”, la relación fuerza del dueño versus fuerza del perro - se inclina a favor del dueño. Con un collar ahorcador, sería posible dañar cuello del perrito, ya que este tipo de collar ejerce la mayor parte de la presión en un solo punto del cuello al momento de la corrección. Este daño “no intencional” no sucede con el collar de pinchos, ya que por su diseño, se distribuye la presión uniformemente alrededor de todo el cuello del perro en cada punta roma.

El principal problema con este collar es que los dueños no saben cómo colocarlo y como escoger el ideal para su mascota. Cuál es el tamaño correcto del Collar de Entrenamiento para mi perro? Lo ideal es que un entrenador lo asesore con su perro en frente para recomendarle el tamaño correcto ya que vienen en diferentes longitudes y con diámetros diferentes. El seleccionará el diámetro ideal y removerá los eslabones hasta que quede la longitud adecuada para la parte superior del cuello, allí es donde se debe colocar.











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