Un perro puede llenar tu vida de alegría pero también de dolores de cabeza, para evitar que esta relación se enturbie debes, desde temprano, poner límites y educar a tu cachorrito para que responda a las órdenes de su amo.

Aquí tienes algunos consejos para que entrenes a tu mascota y se convierta en tu mejor compañero. Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, la palabra adiestramiento significa, amaestrar, guiar o enseñar a un animal.

En el caso del canino, por ejemplo, es un método que permite a un ser humano tener control sobre su mascota y por ende mejorar la comunicación y su relación con la misma.

Antes de adquirir un cachorro se deben unificar los criterios dentro de la familia en cuanto a cuáles van a ser las conductas aceptadas, los horarios de comida, el área para dormir y jugar, así, como la persona que va a estar encargada de la supervisión del perro, es decir, la que va a coordinar las estrategias más idóneas para mejorar continuamente la educación de la mascota.

Una vez establecidas las responsabilidades que cada miembro de la familia va a tener dentro de la “crianza” de este nuevo miembro de la familia, el entrenamiento debe comenzar desde el primer momento en que el animal pone sus paticas dentro de la casa. Este instante es determinante para el establecimiento de las normas que debe seguir el can dentro de su nuevo hábitat. Hay que ser firmes y no dejar pasar ningún detalle que nuestro amigo canino pueda cometer en sus primero días.

Sin importar cuál vaya a ser la función del perro dentro de nuestras vidas (compañía, deporte, protección, etc.) es imperioso educarlos para evitar conductas indeseables como lo pueden ser el morder muebles o hacer sus necesidades por toda la casa. La educación fortalecerá la relación afectiva que exista entre el animal y su amo porque lograrán comunicarse mejor.

El adiestramiento canino no sólo se trata de la educación integral del perro sino también de su dueño, ya que se le enseñan herramientas para poder comunicarse con su mascota de una manera efectiva y sin recurrir a los gritos o a los castigos físicos. Algunas de las ventajas de adiestrar a un perro pueden resumirse en lo siguiente: mejor conducta del animal, mayor orden en el hogar y el desarrollo de la inteligencia y el potencial del perro.

Existen muchas preguntas sobre cuáles son los perros que se pueden entrenar, cuánto tiempo tardan en aprender, edad idónea, etc. Las respuestas son muy sencillas, cualquier can puede adiestrarse sin importar su raza o tamaño, incluso pueden entrenarse los que no pertenecen a una raza definida. El tiempo del entrenamiento depende de sus instintos y disposición al trabajo, una vez que el entrenador se gane su confianza y encuentra el estímulo que más motive al alumno, todo será más rápido.

La edad idónea es desde que llegue a casa, sin excluir por supuesto a los que llevan años en casa pero que deseen que mejore su conducta dentro y fuera de ella. Mientras mas temprano en la vida del perro comience el entrenamiento, menos malos hábitos y conductas indeseadas tendremos que corregir luego.

Las clases de perros suelen durar unos 20 minutos. Lo ideal es que las mismas sean divertidas para la mascota. Será positivo si el can se emociona y se recompensa por las buenas acciones o respuestas positivas a nuestros estímulos o comandos. El nombre es una de las primeras lecciones que debe recibir un perro, se recomienda utilizar palabras de dos sílabas que además posean vocales fuertes (a, e, o) Igualmente, en este texto se exhorta a utilizar el nombre con frecuencia, siempre con denotación positiva y no para regañarlo, para que el animal se acostumbre al mismo y lo relacione con algo agradable.